Después de mucho tiempo me reencuentro con este blog, y en ésta oportunidad es para contarles que pongo en práctica lo que empezó como un hobby, luego decidí aprender, por lo que ingresé a la universidad nuevamente y adquirí un poco más de conocimiento, y de que se trata de pastelería, sí, aprendí y ahora preparo tortas y bocaditos, no sólo en casa, también para pedidos, siii, ya me han realizado pedidos, y no puedo explicar la emoción de poder aportar con un granito de arena, endulzando el paladar y sorprendiendo la vista con las tortas que preparo. He preparado algunas tortas, lamentablemente tengo la mala costumbre de no tomar fotos; sin embargo en las ocasiones que he recordado capturé algunas imágenes.
Cada día es una aventura al lado de mi hijo, pero debo decir que estudiar, la casa, trabajo es una tarea maratónica pero no imposible y que mejor cuando tu nene te dice: .... que lindo mamí, y yo te ayudé....
Aunque no lo pensé como un negocio directamente, la pastelería me ayuda a relajarme y si puede ser parte de algún evento especial con mi mano de obra no hay mejor sensación que la satisfacción.
Estoy orgullosa de mí misma porque me fijé una meta, aprender-estudiar, y que mejor si tu hijito es tu hincha número 1.
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