viernes, 18 de marzo de 2016

Dulce, ácida, dulce-ácida ¡la naturaleza nos las da y ellas se juntan!

Buenos días, si como que mi amanecer es más temprano que de costumbre, bueno trato de ponerme al día con ideas, y en este caso, aunque no es del todo mi creación pues recuerdo haberlo probado en algún lugar, y a decir verdad no se si le hice honor, pero de que quedó sabroso, por el más de medio litro que tomó Nahin, creo que sí.

Lo mejor de todo es que no utilicé miel o azúcar puesto que cada una aportó con su dulce natural:

Ingredientes:

- 4 granadillas
- 2 mandarinas
- 50 gr de uva

bien lavadas y despepadas, excepto la granadilla, en la licuadora mezclarlas y luego colarlas, y como resultado un riquísimo jugo.

Y para animarse a prepararlo en casa, como opción de jugo en el desayuno o lonchera, que mejor que información que realce las propiedades de éstas frutas benditas:


 

















En conclusión gordito fue una lección fácil y sobretodo sabrosa y nutritiva.


viernes, 11 de marzo de 2016

Y empezaron las clases, lonchera escolar, reto o aprendizaje continuo!

Buenas noches mamis, en esta oportunidad les comparto esta pagina del ministerio de salud donde nos ofrecen opciones para los engridos de la casa, está por etapas: inicial y primaria. 
Hay que recordar que la lonchera escolar es una merienda del día, de ninguna manera reemplaza el desayuno, hay que tener en cuenta que los niños que van al jardin o la escuela por lo general se acuestan antes de las 8:00 pm. y considerando que se le levantan a la 5:00 a.m. o 6:00 a.m., hay que sumarle asearlos, cambiarlos, y ello ya representa un desgaste, han pasado cerca de 10 horas, además el recorrido hacia la escuela, ello implica que sus estómagos están vacios y sin mebargo han desgastado energía, entonces, si no toman desayuno, la lonchera se consume a partir de las 10:30 a.m. aproximadamente, 14 horas y media si es que no hay desayunado, entonces no podemos dejar pasar que en ese punto se está contribuyendo a dar origen a un caso de gastritis. Tal vez consideren que exagero, pero como padres está en nuestras manos eseñarles buenos hábitos de alimentación, empezando por inculcarles que el desayuno si o sí es importante, y no es reemplazable, y que la lonchera es una merienda también importante y necesaria. 
Ahora prepararlas es cuestión de creatividad en ambos casos, desayuno y lonchera, pero nuestros amigos del Minsa nos ofrecen una gran ayuda. www.aprendesaludable.pe , he aquí un ejemplo, pueden ingresar y descagr las opciones, todo depende de como quieran combinarlas.



Recuerden padres seamos parte de la educación en alimentación de nuestros hijos.

Saludos

miércoles, 27 de enero de 2016

Mani confitado, ¡el celoso!

No hay nada más rico que comer un puñado de maní confitado recién salido de la paila. En casi todo el mundo se le conoce como praliné y los hay también de avellanas, almendras o nueces, pero estos últimos son más utilizados en la pastelería fina para rellenos o decoración de postres. En España y algunos países de Sudamérica lo llaman "garrapiñada".

Su primer nombre fue "prasline" y el que lo preparó por primera vez fue el soldado y cocinero Clement Lassagne, el mismo que trabajaba para el mariscal y diplomático francés Caesar duc de Choiseul, más conocido como Conde de Plessis-Praslin.

La hermosa hija del duque, María Virginie, no encontraba pretendiente alguno y ya con casi cuarenta años, solo un hombre la amaba en silencio: el soldado y cocinero Clement Lassagne, quien para estar cerca de la mujer de sus sueños, preparaba esta delicia, la misma que todas las tardes agasajaba la mesa de María Virginie. El padre de tan apreciada dama se dio cuenta de las intenciones del soldado y cocinero y teniendo en cuenta la diferencia de las clases sociales, decide prescindir de los servicios de tan osado galante.

Lassagne decide abrir una confitería (1670) denominada Maison de la Praline, que se encuentra a 110 km de París en la villa de Montargis, local que hasta el día de hoy existe.


Pero luego de esta pequeña introducción, debo decir que esta delicia, pues lo es para mí, el sólo percibir el olor del maní calentándose en la cocina, sólo hace viajar a mi memoria y buscar los recuerdos de mi infancia, pues sí, desde muy pequeña mi madre lo prepara con una dedicación única, pues he probado  maní confitado en otros lugares (carretillas o vendedores ambulantes), pero no hay como el sabor casero y dicho sea de paso no he probado otro, y me refiero al casero, vaya que me cautiva ver como se va despegando de la olla el caramelo y éste se ve abrigando a cada grano de maní, pero esa etapa es casi imposible de verla, y es que mi madre dice que es una preparación muy celosa, sí, no estoy diciendo un disparate, yo lo he comprobado, ahora la explicación científica no la se, sólo puedo decir que si mi madre está con dolor de cabeza, no hay buen resultado, se quema, y se quema, y más aún pues ya lo ha preparado en mi casa con mis ollas y cucharones de madrea antes y le ha salido perfecto, pero si está con malestar ni hablar, adiós dulces. Pero lo que si me sorprendió es lo que ocurrió la semana pasada, casi una semana atrás, inicio el proceso colocando medidas iguales de agua, azúcar y maní, y lo deja cocinar por un buen rato, incluso lo deja hasta hervir y luego procedió a mover con el cucharón para que vaya tomando punto, pero en esa ocasión pasó algo inusual mi madre y yo nos enfrescamos en una amena conversación, aunque a decir verdad el contenido del tema no era del todo agradable y no lo digo porque discutía con mamá, para nada, todo lo contrario tratábamos de encontrar la razón a algo que ahora puedo decir es perder parte de nuestra energía, pero en fín, en el momento de la conversación ambas nos encontrábamos cerca, es decir en la cocina y de pronto ella tomó el cucharón para realizar el amasado, y aparentemente todo estaba bien, pero al parecer por continuar conversando mientras hacía el movimiento ondulante la preparación se enojó y se quemó, y si que lo hizo, la casa se llenó de un neblina y el olor de ese ¼ de maní quemándose junto con el azúcar, y entonces mi mamá dijo, es que dicen que esta preparación es celosa, sólo atiné a reirme, pero no por burla, sino de mi asombro, ya que era la segunda razón por la que el maní confitado se puede estropear. Y bueno me quedé con las ganas, y mi boca ya no se derritió, jajajajajaja.